Septiembre suele ser un mes de cambios y nuevos comienzos. Y, como no, de mudanzas. Por lo tanto, el verano puede ser el momento perfecto para acometer un traslado de oficina. En este nuevo post, como empresa de mudanzas y guardamuebles en Madrid, vamos a repasar algunos detalles que convierten estos meses en el momento ideal para cambiar de centro de trabajo.
La tímida reactivación de la economía que de forma progresiva estamos empezando a ver en nuestro país está empujando a algunas empresas a buscar nuevos espacios para desarrollar su actividad. Es ahí donde empresas profesionales como Gufertrans entramos en acción. Tan esencial es elegir el inmueble más conveniente como la empresa que se encargará del traslado. La meta no es otra que lograr que la mudanza no represente una demora excesiva ni repercuta de forma negativa en la productividad de los trabajadores ni de la empresa.
Como seguro que habrás percibido, a lo largo de los meses de julio y agosto, la presencia de trabajadores en las oficinas se llega a reducir entre un 30 y un 50%. Una circunstancia que facilita mucho una eventual mudanza. Más que nada porque la actividad de la compañía no se verá casi afectada. A finales de agosto y antes de la incorporación de toda de la plantilla, puede aprovecharse para ejecutarla. De este modo, al volver los trabajadores ya podrán incorporarse a su nuevo puesto de trabajo.
Cosas a tener en cuenta
Como es entendible, no es lo mismo acometer el traslado de una empresa grande que el de una más reducida. Es preciso tener 100% claro el motivo del traslado. En ocasiones, no se trata tan solo de mudarse a un edificio diferente, sino que se dan cambios, leves o más profundos, en la cultura empresarial o en los métodos de trabajo. Cada traslado es distinto aunque se repiten una serie de pasos que es bueno respetar. Sin perder de vista tres conceptos: planificación, coordinación y ejecución. Es de importancia capital evaluar de forma acertada el volumen de los enseres a trasladar. Por ejemplo, hay que valorar la necesidad de usar ascensores o montacargas. Por último, lo recomendable es que el traslado se ejecute de una sola vez. Si es de gran volumen, se puede hacer por fases, yendo planta por planta. En estos casos suele darse preferencia a los departamentos prioritarios para la actividad de la empresa.