Irse a vivir a una isla es un paso muy importante que implica un gran cambio de vida. Además, hacer una mudanza a una isla conlleva una serie de gestiones que pueden convertirse en un verdadero quebradero de cabeza. Por eso, si tienes pensado mudarte a una isla, debes tener en cuenta una serie de factores para que todo salga correctamente y poder llevar todas tus cosas a tu nueva vivienda sin sufrir daños.
Cosas a tener en cuenta sobre las mudanzas insulares
- Contratar la mudanza con una empresa especializada en mudanzas insulares y hacerlo con suficiente antelación.
- Es necesario tener claro con tiempo qué artículos o enseres no van a ser llevados al nuevo hogar. Para ello, revista todos aquellos que sean inservibles o que vayan a quedarse atrás por diferentes motivos.
- No deben trasladarse artículos como productos perecederos o inflamables, armas de fuego, sellos, joyas, títulos de valor o dinero en efectivo.
- Apartar en una maleta o caja aparte todas aquellas cosas que vayas a utilizar al día siguiente de la mudanza (ropa, zapatos, documentación, joyas, dinero, etc.).
- Si tienes mascotas, lo mejor es dejarlas en otro lugar el día del traslado.
- Vaciar los electrodomésticos por completo el día antes de la mudanza. De este modo, evitarás que algún líquido pueda derramarse causando algún tipo de daño.
- Avisar a la compañía de mudanzas en caso de haber algún tipo de restricción al tráfico, ya sea en el domicilio de carga, como el de descarga. Es habitual en casos de calles demasiado estrechas o peatonales, por ejemplo.
- Procura estar presente durante la mudanza en el domicilio de carga y en el de descarga con el fin de poder hacer las indicaciones necesarias al personal que lleva a cabo la mudanza.
Además de todo esto, en Gufertrans queremos destacar la necesidad de contar con este tipo de mudanzas que requieren de diferentes métodos de traslado, que muchas veces implican el transporte de vehículos si te llevas tu coche, por ejemplo, y en las que puede ser necesaria la realización de algún trámite en aduanas. Por eso, lo mejor es asesorarse adecuadamente y dejarlo todo en manos de los expertos.