Como empresa de mudanzas y guardamuebles en Madrid podemos encargarnos del traslado cuando decidas cambiar de oficina. En estos casos, hay que proceder a la destrucción de documentos y archivos para cumplir con la LOPD y garantizar la confidencialidad al cliente. Pero, ¿qué pasa con los equipos informáticos? Cuando estos son inservibles, hay que proceder a su destrucción de forma concreta. Vemos ahora cómo.
Es innegable que vivimos en un contexto de creciente digitalización y, según recoge la ley, la información contenida en ordenadores, cintas magnéticas o discos duros ha de ser tratada con responsabilidad y atendiendo a la citada ley. Hay que confiar en empresas que gestionen adecuadamente su eliminación definitiva, respetando el medioambiente y la ley de protección de datos de carácter personal. En todo este proceso hay que aplicar una serie de medidas de seguridad jurídicas, técnicas y organizativas. La meta no es otra que garantizar la seguridad de los datos de carácter personal y evitar su alteración, pérdida, tratamiento o acceso no autorizado. En Gufertrans te recordamos que por ejemplo para acometer la destrucción de soportes magnéticos se puede optar por la desmagnetización, la destrucción o la sobre-escritura del área de almacenamiento de la información. Los dispositivos magnéticos son por ejemplo los discos duros, disquetes o las cintas magnéticas de backup.
En cuanto a la destrucción física, se trata de inutilizar el soporte que almacena la información en el dispositivo para evitar su recuperación posterior. Algunas técnicas son la desintegración, la pulverización, la fusión, la incineración o la trituración. Esta última facilita además un tratamiento correcto de los componentes eléctricos y electrónicos.
En lo referente a la sobre-escritura que comentábamos antes, se trata de escribir un patrón de datos sobre los datos contenidos en los dispositivos de almacenamiento. Esta técnica no se puede utilizar en los soportes dañados ni en los que no sean regrabables, como los CD y DVD.
En definitiva, echando mano de cualquiera de estos métodos nos aseguramos de que sea imposible que terceros tengan acceso a datos personales y sensibles. Por último, los restos resultantes se reciclan para cumplir con lo requerido por la ley en cuestiones medioambientales.